sábado, 19 de septiembre de 2009
Estaba con la mirada perdida y caminaba un sábado por la calle armenia, mucha gente feliz, demasiado feliz para él. De a poco sentía que ella podría aparecer delante de él, todo el día la sintió cerca. Y a si continuo su viaje, en sus auriculares sonaba New order, demasiado oscuro para él, lo cambio por algo mas, feliz, pero eso no cambio su trayecto, no cambio su sonrisa borrada. Se reunió con gente que quiere y eso tampoco logro sacarle una sonrisa, tomo café, hizo reír a los demás, pero a él no. Que le pasara al campeón, ese que antes era feliz, que contagiaba emoción.
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Cada momento de felicidad tienen fecha de caducidad (taaaaaarde o temprano), pero se repone, hay nuevos momentos. Y que no seas completamente feliz no quiere decir que tengas que estar triste o apagado. Puedes estar normal, contento...Pero estar pletórico es el mejor traje. O el mejor disfraz.
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