En la casa todos esperaban que él dijera algo, algo interesante, era el que los hacía reír, pero desde hacia días no podía hablar, estaba en silencio, protegido de todos. Hacía días, sentía ese dolor asqueroso que lo paralizaba. Se sentía horrible, solo quería llorar y escuchar discos, llorar y tomar cerveza. La vida había cumplido un ciclo y necesitaba hacer un duelo, pero todos esperaban algo mas de él. Así que se paro delante de todos, los observo uno por uno, sabía que ya no era un niño, que debía responder de acuerdo a su edad, pero eso no le importo, 21 años, todavía soy joven pensó, y entonces rompió en un llanto,que duro horas, arruinando la navidad mas asquerosa del mundo. Así siguió hasta que dejo de sentir miedo, dejo de querer emborracharse con nada, algo había cambiado, Por fin la tormenta había pasado, pero ya era invierno otra vez, habían pasado 6 meses desde que ella lo dejo, el letargo había terminado y afuera hacia frió otra vez.
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