martes, 6 de abril de 2010

Toronto

Fue a una agencia de viajes, pidió que le den el pasaje al lugar mas lejos que le alcance el dinero y allá se fue, escapándose, como siempre. Ahora vive solo en la nada, parece ser feliz, junta nieve cuando tiene ganas y cuando no, solo se sienta a leer en el sillón. Hace las compras en el almacén de una señor que no sabe su nombre ni él el suyo, pero sonríen como si se conocieran de años. Siempre piensa en la noche en que le confeso su amor y siempre se pregunta que habría respondido ella si él no salia corriendo de la casa, se subía a un avión en cuestión de horas y desaparecía por completo, siempre piensa en eso.

1 comentario:

  1. Hola Lauti, me senti super identificada con tu relato...el 4 de enero...decidi irme...Habia prometido no ilucionarme..pero el me convenció me dijo que el 31 de febrero (enero para los no iluso) nos iriamos jutos a reconocernos a reintentarlo todo peor se asusto y el 28 sijo No puedo...no lo entendi pero no podia hacer nada ya...yo no le habia pedido nada..solo que no e prometa nada...y asi fue q el 2 de enero arranque mi viaje al sur....primero estuve unos dias en la aridez de chubut...el clima seco ocmo yo no me ocnmmovia...debia seguir, ahí no iba a encontrar mi jardin (ese jardin que busco la causa de mi existencia...)y llegue a Ushuaia depsues de 24 horas tres micros...cruce de Magallanaes....y encontre miles de jardines, uno por cada estado de animo...compraba en una almacen...leia o caminaba a veces me aunia a la sociedad y hacia ocsas turisticas otras en el bosque con mis duendes y hadas....Yo soy el y ella...los de tu relato..Pero.. ese "escape" no fue por mi temor, sino por el temor del otro...

    Gracias Lauti por este fragmento...yo lo retitularia Ushuaia...

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